Hoy, México conmemora un aniversario más de la promulgación de la Constitución General de la República de 1917, un documento fundamental que ha sido pilar de la vida institucional y jurídica del país. Sin embargo, esta celebración se da en un contexto complejo y enrarecido, marcado por debates y desafíos que ponen a prueba la fortaleza de nuestro sistema democrático.
Hace un año, el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador presentó un paquete de reformas que incluyen, entre otras, la renovación del poder judicial federal. Estas propuestas han generado un intenso debate nacional, pues tocan fibras sensibles de la estructura del Estado mexicano. En un momento en el que la independencia y la imparcialidad del Poder Judicial son más necesarias que nunca, es imperativo que cualquier cambio se realice con el máximo respeto a los principios constitucionales y con el consenso de todos los sectores de la sociedad.
Además, este aniversario se celebra en un escenario internacional desafiante. Las amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de incrementar aranceles a México, pusieron a prueba la capacidad de respuesta de nuestro país. Afortunadamente, bajo el liderazgo de la presidenta Claudia Sheinbaum y con el respaldo popular, se logró sortear esta crisis con éxito. Este episodio refuerza la importancia de la unidad nacional y de una política exterior firme y estratégica, que defienda los intereses de México sin ceder a presiones externas.
En este contexto, la Constitución de 1917 debe seguir siendo el faro que ilumine el camino de la legalidad y la esperanza. Es un documento vivo, que no solo refleja la historia y las luchas del pueblo mexicano, sino que también debe adaptarse a los nuevos tiempos sin perder su esencia. Su espíritu debe guiar a las instituciones para promover el cumplimiento de la ley sin abusos, garantizando que quienes procuran e imparten justicia lo hagan con equidad y respeto a la dignidad humana.
Hoy más que nunca, es necesario reafirmar nuestro compromiso con los valores constitucionales: la justicia, la igualdad, la libertad y el respeto a los derechos humanos. Que este aniversario sirva como recordatorio de que la Constitución no es solo un texto, sino un pacto social que nos une como nación y nos obliga a construir un futuro más justo y próspero para todos.
