POR KEYLA RICO
ANESTESIA
Quiero tener el alma anestesiada,
se sabe que todo lo malo pasa,
y no es que quiera escapar a mi karma,
si no más bien no sentir
que me consume una llama
quemando mi interior
y no existe cómo poder apagarla.
ESPACIO
Te fuiste y dejaste tanto espacio en mi armario;
te llevaste los momentos felices,
planes sueños, inseguridades, mentiras,
infidelidades, enigmas…
No sé qué sentir respecto a tu ausencia;
sé que todo este espacio podrá ser llenado
pero no con cualquier cosa.
Seré selectiva y a la primera me iré…
Eso dije la última vez
y tarde mucho en irme de ti.
QUE SE DILUYA
Deja que todo se diluya
que su voz se quede en el vacío;
deja que su recuerdo se lo lleven las nubes
y los llueva en otros campos.
Deja de aferrarte a lo que nunca pasó
deja que se diluya…
No es que desaparezca
si no que pierda su poder
que la melancolía
se apropie y veas todo gris.
Déjalo que se diluya
¡déjalo ir! ¡déjalo ir!,
y que se pierda en el tiempo.
LLEGADA
Llegaste de la manera que menos pensé,
con esa sonrisa
y esos ojos invitándome a soñar.
Poco a poco los medios se desvanecen
las heridas empiezan a curarse.
Hoy me es casi imposible recordar por qué sangraba
La melancolía, la tristeza se van
y al irse dejan paso a la ilusión,
a la alegría, al amor…
Y sí llegaste de la manera que menos imaginé,
pero qué bueno que llegaste.
ALICIA
Tu recuerdo ya no duele
como el día de tu partida
la tristeza llega a veces, es inevitable,
como inevitable no sentirte en mí.
Hasta hace poco te recordaba con dolor,
cada vez que pensaba en ti lo hacía con sufrimiento y tristeza…
Ahora puedo decir que tu recuerdo ya no duele,
ahora
cada vez que te recuerdo lo hago con alegría
con la sensación que en verdad lo tuve todo en la vida,
con ganas de honrarte haciendo las cosas bien,
haciendo que te sientas orgullosa de mí.
Keyla I. Rico Raya. Matamoros, Tamaulipas (1993). Docente e Ingeniero Químico. Egresada del Instituto Tecnológico de Matamoros. Actualmente participando en mi primer taller de poesía.