Ya nada más falta que lo encuentren…

Por Rosa Elena González

A EDGAR DANES, ya expresidente del Tribunal Electoral de Tamaulipas, en este momento le aplican muchos de los dichos populares, pero seguramente el que más se le ajusta es, “más vale aquí corrió, que aquí quedó”

Como dijera Cantinflas, el interfecto en cuestión, es decir DANES, nuevamente es noticia luego de que el Presidente de la Junta de Gobierno en el Congreso local, diputado HUMBERTO PRIETO, confirmó que ya procedió el desafuero de quien fuera presidente del Tribunal Electoral de Tamaulipas y con ello la autoridad Judicial puede proceder penalmente por la acusación de abuso sexual que pesa en su contra, ahora ya nadamás falta que lo encuentren.

Antes de que declararan su desafuero, trascendió que EDGAR DANES había renunciado al cargo, quizá la presentó a distancia porque es un hecho que desde hace un buen tiempo no está en Tamaulipas.

En pasadas entregas se comentó que DANES ya no estaba en la ciudad, ni siquiera en el país, hoy que ya no tiene fuero se duda, a menos de que quiera hacer alarde de valentía, que aparezca por cuenta propia

Uno de los delitos por los que lo acusan, y por el cual procedió el desafuero de DANES ROJAS, es por una denuncia de abuso sexual en contra de una menor de Nuevo Laredo, asunto delicado y por el cual debe caer el peso de la ley en contra de quien cometa esos aberrantes hechos, pero quizá lo que más pesa sobre don EDGAR es otro asunto relacionado con su quehacer en el Tribunal Electoral que atañe a ese mismo municipio fronterizo donde se dice tiene otras cuentas pendientes.

La ambición no es buena consejera, tampoco cometer arbitrariedades sintiéndose intocables o quedarse con lo que no les corresponde pues la justicia o ajuste de cuentas, de una manera u otra, tarde o temprano llega.

Eso seguramente DANES ya lo entendió y, como dice el dicho, puso tierra de por medio, se fue antes de que llegara su desafuero porque sabía que quizá ni eso, el fuero, lo salvaría, la muestra, o la advertencia, la tenía desde el día que lo balearon.

Tentó mucho a su buena suerte DANES, tenía muchos señalamientos de corrupción, abuso de confianza, actos de violencia como golpear a un estudiante y de acoso sexual, no entendió que a cada santo se le llega su hora y la de él la tenía encima.

Ahora es un hecho que con el asunto del desafuero y las acusaciones de violación sexual su carrera como abogado está acabada, ¿quién en su sano juicio podría contratar a un tipo con esos antecedentes?, si acaso otros iguales. Tampoco podrá ya aspiran a un puesto público, aunque presuma todas sus medallas académicas, pues es obvio que esas no le quitan lo sinvergüenza.

Pero tampoco podrá vivir con tranquilidad en Tamaulipas, bueno, quizá ni regresar, pues advertido esta de que cuentas pendientes tiene que pagar.

Poco le importó a DANES, con su actuar, exponer a su familia, que sus hijos carguen con el peso de su mala conducta pues les arrastró al desprestigio, peor aún, les puso en peligro.

En fin, la situación es que EDGAR DANES ya fue desaforado, esperan que la justicia, la de la Fiscalía, proceda por los delitos que pesan en su contra, ahora ya nadamas falta que lo encuentren, el hombre, apenas le dieron de alta en el hospital y aplicó la máxima, más vale aquí corrió que aquí quedo, sabía que su debacle venia y nadie lo defendería pues a la gran mayoría de sus amigos, aliados y exjefes les ha quedado mal.